Sin acopiadores, se lograrían bajar los precios de la carne
Por Javier Claudio
Los precios en la venta de carne de res se mantienen en la especulación, debido a que se establecen con una diferencia desproporcional, la que deriva del intervalo comercial entre el productor y la puesta en venta en centros comerciales, afirmó el productor Juan Daniel Núñez Salinas.
El socio de la Asociación Ganadera de Nuevo Laredo-Ciudad Guerrero, estableció que la coyuntura aparece ocupada por el intermediario, luego que el productor deja un vacío en donde el que mayormente pierde es el consumidor.
“Como productores, vendemos el kilogramo de canal apenas en un 25 por ciento del último precio a la venta de todo corte, que ya puesto en las vidrieras de las carnicerías y centros comerciales alcanza hasta los 280 pesos el kilogramo a la venta”, replicó el ganadero.
Afirmó en que el consumo de carne de bovino es difícil de alcanzar por la economía popular, debido a los constantes incrementos, propiciados en su mayor parte por la invariable “tajada” que se lleve al introductor.
Asintió en el esfuerzo que realiza el Rastro Municipal por fomentar el consumo de carne de la región a través de las carnicerías de barrio, la que se pretende establecer más barata que la que se trae del interior del país.
Hizo saber acerca del predominio de la especulación en los precios de la carne de res, principalmente, fenómeno que proviene de quienes traen el producto del interior del país y desafortunadamente mantiene apropiado el mercado local.
La mayoría de los cortes en las carnicerías rebasan como mínimo los 200 pesos el kilogramo y sólo en situaciones de oferta está por debajo de esta cantidad, mientras que los cortes llamados de lujo o bien de fajita americana se ofrece en carnicerías alcanzarían hasta los 400 pesos el kilogramo.
Núñez Salinas, asintió en que la población consume poca carne proveniente de ganado de nuestra región, principalmente porque el mercado está acaparado por los grandes consorcios cuya carne procede del interior del país.