Dr. Jorge A. Lera Mejía y Lic. Bárbara Lera Castellanos.
Desde hace más de dos décadas, en Tamaulipas se viene incursionando para consolidar el papel estratégico que nuestra entidad juega en los temas de energías convencionales y no convencionales.
Para nadie es desconocido que, desde inicios del siglo XX la zona Huasteca de Tamaulipas, apareció en el mapa geoeconómico mundial como la región de mayor potencial de explotación de petróleo nacional e internacional, los descubrimientos de ricos pozos petroleros que dieron dicha fama, se conocieron como “La Faja de Oro” de las Huastecas, no tardaron en instalarse en Tampico y Madero, las más importantes Refinerías Transnacionales Inglesas y Norteamericanas. Así nombres como la Shell, El Águila entre otras, dieron la vuelta al mundo.
Desde julio de 2019, la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) y el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), firmaron un acuerdo para la creación del Centro Investigación e Innovación en Energía y Servicios, cuya infraestructura estaría a la vanguardia en el desarrollo de proyectos de alto impacto para el sector energético de México.
Ante la importancia de la Región de Burgos con los mayores yacimientos de Gas Natural del país, el proyecto se propuso tener la sede en la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, donde la UAT posee amplia infraestructura y experiencia en ingeniería ambiental y energética, por lo que se pretende impulsar un modelo de vinculación para formar los recursos humanos en distintas áreas y especialidades que requiera el sector a nivel regional y nacional, además de desarrollar tecnología y ofrecer soporte de servicios acreditados.
Ante el arranque paralelo de los Parques Eólicos en el norte del estado, a la par del proyecto con el IMP, se propuso impartir en la Facultad Reynosa Rodhe de la UAT, la innovadora carrera de Ingeniero en Energías Renovables.
Por otra parte, en el año 2018, desde el Campus Sur de la UAT, se desarrolló un proyecto que busca generar electricidad en las zonas costeras del Estado, implementando un sistema híbrido para el aprovechamiento de recursos renovables como el viento, el oleaje y las corrientes marinas.
El proyecto era impulsado por el Centro de Investigación y Desarrollo de Ingeniería Portuaria, Marítima y Costera (CIDIPORT) con sede en la Facultad de Ingeniería “Arturo Narro Siller” Tampico en el Centro Universitario Sur.
El director del centro Sergio Jiménez Hernández, explicó en esa ocasión que se pretende el aprovechamiento de energías alternativas y limpias, dentro del trabajo que realiza la UAT para contribuir al desarrollo sustentable del estado.
“Nos hemos dado la tarea de buscar alternativas, la zona costera tiene otras fuentes de energía que están potencialmente esperando, como son las corrientes, las mareas, el oleaje y el viento en zona marítima, la estrategia es hacer un dispositivo que de manera continua este generando energía”
El proyecto se denomina “Integración de Energía Híbrida Limpia y Renovable de Sistemas Híbridos Integrales Océano- Atmósfera, a la Red Eléctrica de Tamaulipas” y en el colabora Eustorgio Meza Conde, Profesor-Investigador de la UAT en la zona sur.
En abril del 2021, la UAT propuso crear nuevas metodologías para generar energías alternativas para generar energías alternativas que, además de ayudar al medio ambiente, permitan el aprovechamiento de desechos industriales y agropecuarios.
Al participar en una nueva edición del programa “ConectadODS”, que realiza el Comité para el Desarrollo Sustentable de la UAT, la Dra. Gloria Sandoval Flores, coordinadora académica de la Maestría en Ingeniería en Gas y Petróleo de la Unidad Académica Multidisciplinaria Reynosa Aztlán, explicó la participación que tiene la Universidad en estudios e investigaciones en materia de energías alternativas.
Más reciente, a fines del 2023, las empresas del sector energético ubicadas en la entidad solicitaron la ayuda de la UAT para impulsar diversos proyectos en rubros como hidrocarburos y energías renovables, planteamiento realizado por el gobierno del estado a la máxima casa de estudios.
Con diversos planes emprendidos por compañías mexicanas y extranjeras a aterrizar durante los próximos años, el titular de la Secretaría de Desarrollo Energético, José Ramón Silva Arizabalo, se reunió con el entonces recientemente nombrado rector Dámaso Anaya Alvarado, esto en el Edificio Administrativo del Campus Zona Sur, en Tampico.
CREACIÓN DEL INSTITUTO DE ENERGÍA DE TAMAULIPAS:
Estos esfuerzos interdisciplinarios, dieron su mayor fruto este jueves 19 de septiembre, cuando el
Gobierno del Estado de Tamaulipas a través de la Secretaría de Desarrollo Energético y la UAT, inauguraron el Instituto de Energía en Tamaulipas en la zona sur de Tampico.
Con la presencia del secretario José Ramón Silva Arizabalo y del rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Dámaso Anaya Alvarado, se cortó el listón para que próximamente alumnos y catedráticos se especialicen en el ámbito de la energía, con la misión de ser un faro de innovación, investigación y formación en el campo energético.
En su intervención, Silva Arizabalo destacó que este instituto será un pilar en la transición energética, promoviendo la investigación, la innovación y la formación de talento especializado.
“La creación de este instituto no solo representa un avance académico y científico, sino también un compromiso con el bienestar de nuestras comunidades. A través de la investigación y el desarrollo de tecnologías energéticas avanzadas, buscamos no solo reducir nuestra huella de carbono, sino también generar oportunidades económicas y mejorar la calidad de vida de todos los tamaulipecos”, señaló.
“A las y los estudiantes que hoy inician este emocionante viaje, les digo: el futuro está en sus manos”, añadió.