Albañilería improvisada es una “fuga” de cuotas para el IMSS
Por Javier Claudio
Crítico se tornó el desempeño de la actividad de albañil, luego que, ante el severo déficit de mano de obra en este oficio, dio paso a la informalidad, la inapropiada atención de este tipo de trabajadores, el retraso en obras y la afectación en el ingreso de pago de cuotas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“La construcción continúa sin suficientes albañiles desde hace tiempo y tenemos que recurrir a la contratación informal, propiciando con ello baje la calidad en obra y se deje de pagar cotización al IMSS”, dijo José Samuel Hernández Núñez, administrativo de una empresa.
Señaló que para cubrir el déficit se ha intentado de todo hasta ocupar migrantes, quienes, dada la informalidad, poco duran y no se les da de alta ante el IMSS, además de que en muchas de las ocasiones piden al momento ser liquidados.
Afirmó que este déficit de albañiles, además de crear una situación de caos, se les tiene que poner mayor atención en los albañiles informales para que los trabajos que realicen tengan la calidad necesaria.
“Debe aclararse que, por ser nuevos, no a todos se les va a poner a echar la mezcla”, comentó a fin de remarcar la dificultad que tienen los constructores para completar la cantidad requerida de trabajadores en cada oba.
Abundó sobre el incumplimiento del alta en el IMSS de los trabajadores contratados, debido a que por ser informales se tiene dificultad para cumplir con la ley, pues en tanto se les da de alta, normalmente cuando concluyen la gestión ya dejaron de trabajar.
“Esta situación ha formado un círculo vicioso, pues no existir pago de cuotas para el IMSS, se enfrentar las inspecciones con amago de sanción y se tiene que hacer un mayor esfuerzo para asegurar la obra de calidad”, comentó por su parte el constructor Manuel de Jesús Olivas.